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(CNN) — La tragedia sacudió un festival religioso en el norte de la India, donde testigos presenciales describieron una escena de caos y confusión que resultó en la muerte de decenas de personas en una avalancha multitudinaria.
Al menos 121 personas, en su mayoría mujeres, perdieron la vida y otras 35 resultaron heridas debido al hacinamiento en un sermón en la aldea de Mughal Garhi, en Uttar Pradesh, este martes. La Policía está investigando a los organizadores, ya que cerca de 250.000 personas asistieron al evento, superando ampliamente las expectativas iniciales, y solo se desplegaron unas pocas decenas de agentes de seguridad.
El ministro jefe de Uttar Pradesh explicó que la aglomeración ocurrió cuando las devotas se apresuraron hacia el escenario para tocar los pies de Bhole Baba, el autoproclamado dios o gurú que dirigía el evento. Funcionarios adicionales indicaron que las devotas intentaban recoger la tierra que había sido pisada por el coche de Bhole Baba al salir de la ceremonia.
Desde un hospital local, Subhash Lal, un guardia de seguridad, relató a CNN que perdió a su madre en el trágico suceso: “El cuerpo de mi madre está aquí… El mayor dolor que se puede sentir es por una madre, todo el mundo lo sabe”. Lal añadió que la tragedia fue resultado de un descuido tanto de la administración como de los organizadores.
Familiares de las víctimas, incluyendo a mujeres que lloraban afuera de las casas de tres víctimas de la misma familia, expresaron su dolor. Las pertenencias de las personas fallecidas en la avalancha estaban esparcidas en el lugar del incidente, según fotografías de Ritesh Shukla/Getty Images.
En declaraciones a Reuters, una sobreviviente llamada Rekha describió el caos que siguió al sermón y señaló: “Cualquiera que se haya caído, no se levantó, fue pisoteado por la multitud y murió”. Un hombre identificado como Chedilal contó cómo buscó desesperadamente a su hija de 30 años entre los escombros humanos, encontrándola finalmente en el hospital.
El gobierno de Uttar Pradesh ha implementado un equipo de investigación especial para examinar la mortal avalancha, según lo anunciado por el primer ministro del estado, Yogi Adityanath. También se ha confirmado una investigación judicial por parte del tribunal superior del estado.
Adityanath señaló que la responsabilidad recaía en los organizadores, afirmando que se asumía que la seguridad interna sería gestionada por ellos, mientras que la administración proporcionaba seguridad exteriormente.
La Policía ha estado buscando a Bhole Baba y ha acusado a los organizadores del evento de homicidio culposo, restricción injusta y de provocar la desaparición de evidencia o proporcionar información falsa. En una declaración a través de su abogado, Bhole Baba ofreció sus condolencias y culpó del trágico incidente a “elementos antisociales”.
El informe policial reveló que se había autorizado un evento para 80.000 personas, pero más de 250.000 devotos acudieron al lugar. Durante el intento de evacuación, la multitud se descontroló y decenas de personas fueron pisoteadas.
Las aglomeraciones en eventos religiosos en India no son infrecuentes y han resultado en incidentes mortales anteriores, subrayando la necesidad de medidas de seguridad y control de multitudes más eficaces.