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(CNN) — Tropas rusas han logrado ocupar partes cruciales de una ciudad localizada en una colina en el este de Ucrania, consolidando una posición estratégica que podría complicar los esfuerzos de las fuerzas ucranianas para defenderse de futuros ataques.

La pequeña ciudad de Chasiv Yar, situada en un terreno elevado, ha sido epicentro de intensos combates y es considerada esencial para el control de la región de Donetsk, la cual sigue en manos de Ucrania. La ciudad ofrece vistas dominantes hacia áreas bajas y ciudades importantes como Kramatorsk y Slovyansk.

El Ministerio de Defensa ruso anunció el jueves la captura del distrito más oriental de Chasiv Yar. Por su parte, un portavoz militar ucraniano informó que sus fuerzas se retiraron de la zona debido a la destrucción de sus defensas y al aumento del riesgo para los soldados.

Las fuerzas rusas avanzan hacia una carretera vital que une Bakhmut con Konstantinivka y Pokrovsk, una ruta de suministro crucial para el ejército ucraniano. La retirada es un golpe para Kyiv, que sigue lidiando con ataques rusos persistentes y una escasez de municiones derivada de retrasos en la ayuda militar occidental.

Por otro lado, la llegada de armas occidentales ha mejorado la situación para Ucrania en las últimas semanas. Sin embargo, el control de Chasiv Yar por parte de Rusia permitiría una ventaja en futuros ataques con drones y artillería contra tropas ucranianas.

El presidente ruso, Vladimir Putin, mantiene su objetivo de dominar toda la región de Donetsk. La toma de esta ciudad podría amenazar a localidades más grandes al oeste y complicar las defensas ucranianas en entornos urbanos, históricamente más difíciles de defender.

Chasiv Yar, que tenía una población de alrededor de 12,000 personas antes de la guerra, ha visto la mayor parte de sus residentes huir. Solo unos pocos civiles permanecen, negándose a abandonar sus hogares.