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Durante una extensa sesión de la Comisión de Pesca que se prolongó desde las 8:30 hasta las 21:30, el diputado Daniel Manouchehri (PS) empleó un tono sarcástico al cuestionar al ministro de Economía, Nicolás Grau (FA). Manouchehri insinuó: “No sé si el ministro ha vuelto a cenar a la casa del señor Pablo Zalaquett”.

La comisión, liderada por el diputado Jorge Brito (Frente Amplio), estaba convocada para votar un proyecto gubernamental que busca establecer un nuevo fraccionamiento entre el sector pesquero artesanal e industrial. Esta propuesta forma parte de la Ley de Pesca, que el Ejecutivo decidió dividir para facilitar su tramitación.

El malestar de Manouchehri surgió ante la negativa del Gobierno de patrocinar una indicación presentada por él y las diputadas Daniella Cicardini (PS) y Carolina Tello (indep. Frente Amplio). La indicación proponía distribuir la cuota de captura del jurel con un 70% para la pesca industrial y 30% para la artesanal en las regiones del norte del país, mientras que el resto de las regiones recibirían un 50% cada una.

El diputado Brito y el Ejecutivo objetaron la propuesta, argumentando que rompía el equilibrio fiscal del proyecto, ya que los principales ingresos impositivos provienen del sector industrial. Brito enfatizó la necesidad de mantener este equilibrio para que el subsecretario de Pesca, Julio Salas, pueda seguir gestionando la legislación.

Manouchehri se mostró molesto por estas declaraciones y señaló que no se dejarán presionar por supuestas amenazas. En medio de la discusión, el subsecretario Salas intentó calmar los ánimos, aclarando que Brito se refería a que si el proyecto superaba determinadas regulaciones, pasaría a ser competencia del ministro de Hacienda.

El desacuerdo se trasladó al pleno, donde la Cámara discutía el proyecto de permisología que también está a cargo del ministro Grau. En los pasillos, Manouchehri acusó públicamente a Grau de usar amenazas indirectas sobre la continuidad de Salas. Este último negó conocer a qué amenazas hacía referencia el diputado. El clima de desconfianza aumentó entre los parlamentarios del Frente Amplio y del PS, quienes se acusaron mutuamente de ocultar intereses tras la decisión del Ministerio de Economía.

A la vez, desde el Frente Amplio expresaron su descontento por la ausencia de Manouchehri y Cicardini durante la votación de una norma que beneficiaba a la pesca artesanal. Los socialistas defendieron su ausencia, alegando la necesidad de participar en la discusión paralela del proyecto de permisología.