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En un reciente informe revelado, se ha destacado una preocupante disminución en el monto de las pensiones que perciben los nuevos jubilados, atribuyéndose este fenómeno a los retiros efectuados de los fondos de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).

La reducción se estima en un 30%, una cifra significativa que está afectando el poder adquisitivo de quienes inician su retiro laboral. Este impacto es el resultado directo de las políticas que permitieron a los afiliados retirar una parte de sus ahorros previsionales en medio de la crisis económica generada por la pandemia.

Analistas del sector han advertido sobre las consecuencias a largo plazo que podría tener esta caída en las pensiones, no solo para los individuos afectados, sino también para la sostenibilidad del sistema previsional en su conjunto. Desde el gobierno y las entidades regulatorias, se están explorando alternativas para mitigar esta situación y asegurar una vejez digna para todos los ciudadanos.