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El primer acto de un drama que ha sacudido al Departamento de Justicia terminó el viernes cuando un alto funcionario firmó una solicitud formal para retirar los cargos de corrupción contra el alcalde de Nueva York después de que la fiscal interina de Manhattan se negara y renunciara.
El funcionario, Emil Bove III, había ordenado originalmente a los fiscales federales de Manhattan que habían presentado el caso contra el alcalde Eric Adams buscar su desestimación. Pero la líder de la oficina de Manhattan, Danielle R. Sassoon, renunció en lugar de obedecer, y fue seguida por al menos otros seis fiscales en Nueva York y Washington.
El Sr. Bove, cuya orden especificaba que la decisión de desestimar el caso no tenía nada que ver con su fortaleza legal, finalmente se vio obligado a firmar la petición él mismo, junto con otros dos fiscales de Washington, Edward Sullivan y Antoinette T. Bacon.
