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Desde la llegada de Jorge Almirón en 2024, Colo Colo ha fortalecido su carácter en competiciones coperas, lo que quedó evidenciado este martes en su partido inaugural de la Copa Libertadores ante Atlético Bucaramanga. El equipo colombiano regresaba al torneo continental después de 27 años, creando un ambiente de celebración en el estadio Américo Montanini de Santander. A pesar de un inicio desfavorable, el conjunto chileno logró un empate 3-3 después de remontar dos desventajas de dos goles cada una.
Las preocupaciones del entrenador del equipo visitante se centraban en el estado del campo, afectado por la lluvia, lo que dificultaba la circulación del balón. Este factor fue aprovechado por el equipo local, que presionó a Brayan Cortés con intentos de larga distancia, resultando en el primer gol a los nueve minutos. Un pase largo de Aldair Gutiérrez dejó a Kevin Londoño en posición de gol, superando a la defensa chilena.
Lejos de desmotivarse, el conjunto rival aumentó su ventaja a los 24 minutos con una excelente combinación entre Fabián Sambueza y Luciano Pons. Colo Colo respondió antes del final del primer tiempo con un penal ejecutado por Javier Correa, recortando la diferencia. A pesar de un nuevo tanto del equipo local en el segundo tiempo, Colo Colo remontó con goles de Mauricio Isla y un segundo tanto de Correa, asegurando un empate valioso antes de su próximo enfrentamiento contra Fortaleza en casa.
