El mundo del tenis continúa en plena discusión tras la sorpresiva eliminación de Alexander Zverev en la segunda ronda del Masters 1000 de Shanghái, donde cayó ante el francés Arthur Rinderknech. Este resultado no solo generó críticas sobre la irregularidad del alemán, sino que también reavivó un viejo debate: ¿quién es el mejor jugador en la historia que nunca ha obtenido un título de Gran Slam?
En medio de este acontecimiento, el nombre de Marcelo Ríos resurgió como un referente indiscutible en esta categoría. Ríos, que llegó a ser número uno del mundo en 1998, es frecuentemente mencionado como el mejor tenista sin un título de Grand Slam, y su talento y estilo único siguen siendo punto de referencia en la historia del deporte. Grandes figuras como Yevgeny Kafelnikov y Mardy Fish han expresado elogios hacia el chileno, resaltando su talento natural y carisma, pese a no haber conquistado la máxima gloria en los majors.
La discusión se intensificó en redes sociales, donde el medio especializado The Big Three afirmó que “Zverev es el mejor. Cualquier jugador que piensen, Zverev llegó a más finales de Grand Slam, ganó más torneos Masters 1000 y tiene un récord superior contra los top 10”. Aunque estos datos estadísticos parecen respaldar a Zverev, no todos los expertos compartieron esta opinión.
El exnúmero uno Yevgeny Kafelnikov no dudó en responder con contundencia: “¡No hay mejor jugador en el mundo sin un título de Grand Slam que Marcelo Ríos! ¡Punto!”. La autoridad del ruso en el circuito genera peso en el debate, que ahora tiene en su centro al talentoso chileno, cuya carrera y estilo dejaron huella en la historia del tenis.
Asimismo, Mardy Fish, exjugador estadounidense y rival de Ríos en su época, también apoyó que el talento del chileno es incomparable: “En cuestión de talento, prefiero a Ríos. Habría destacado aún más en esta era de canchas lentas y pelotas modernas. Jugó en tiempos de superficies más rápidas y con saque potente”. Es destacable que Ríos no solo fue un jugador excepcional en la cancha, sino también por su personalidad rebelde que lo convirtió en una figura diferente.
Tanto Ríos como Zverev han sido etiquetados como “el mejor sin corona”. Ambos alcanzaron la cima del ranking mundial – Ríos en 1998 y Zverev como número dos en 2020 y actualmente en el puesto tres –, pero ninguno logró colgarse el prestigioso trofeo de un Grand Slam. En términos de títulos totales, Zverev supera ampliamente a Ríos con 23 coronas, incluyendo medallas olímpicas y títulos en los Masters 1000. Por su parte, Marcelo Ríos suma 18 títulos, muchos de ellos en épocas en las que los torneos internacionales eran más competitivos por el peso y la exigencia de los partidos.
Pese a la diferencia en la vitrina, el carisma, talento natural y estilo inconfundible del chileno continúan dándole un aura especial. Su breve paso por el puesto número uno del mundo, junto a su zurda quirúrgica, lo convierten en una leyenda que aún provoca admiración y debates en la comunidad tenística.
Mientras Zverev todavía tiene la oportunidad de revertir su historia y sumar éxitos a su carrera, las dudas permanecen. Muchos analistas consideran que aún puede lograrlo, pero la realidad es que la historia de ambos sigue escribiéndose y alimentando un apasionante debate sobre quién merece ser considerado el mejor tenista sin un título de Grand Slam en la historia.