El presidente Donald Trump partió de Sharm el-Sheikh, Egipto, el lunes, tras reunirse con líderes mundiales en una cumbre para abordar el futuro de Gaza. En su discurso ante el Parlamento de Israel, para celebrar el retorno de los últimos rehenes vivos de Gaza, Trump afirmó que la guerra en Gaza “ha terminado”.
Tras la reunión, Trump y otros líderes firmaron un documento sobre el acuerdo de cese al fuego en Gaza, cuyos detalles no fueron hechos públicos. La Casa Blanca no respondió de inmediato a las preguntas sobre qué firmó exactamente el mandatario.
Durante la cumbre, Trump indicó que era el momento de comenzar a planificar la ‘Fase 2’ de un acuerdo de paz más amplio en la región. Además, en su discurso, afirmó que la guerra en Gaza había llegado a su fin y manifestó su respaldo a los esfuerzos internacionales para lograr una resolución duradera.
La reunión en Egipto se produjo en un contexto de avances en las negociaciones para la liberación de rehenes y el cese de hostilidades. Trump resaltó la importancia de seguir trabajando en la consolidación de un acuerdo de paz estable y duradero, destacando su disposición a liderar futuros esfuerzos en la región.
La celebración en Israel fue especialmente significativa, ya que miles de personas se congregaron en áreas centrales de Tel Aviv, conocidas como Plaza de los Rehenes, para ver la transmisión en vivo de la liberación de los rehenes israelíes capturados en Gaza. Esta recuperación constituye un paso importante en los esfuerzos de paz y en la estabilidad regional.
Los detalles específicos del acuerdo, así como las negociaciones privadas entre las partes involucradas, permanecen confidenciales, pero este avance representa una esperanza en medio de un conflicto prolongado. La comunidad internacional observa con atención cómo evoluciona esta situación y cuáles serán las próximas acciones para garantizar la paz en la zona.
Trump afirmó también que el fin del conflicto en Gaza marca un momento de esperanza y oportunidad para todos los involucrados, y reiteró su compromiso de seguir apoyando los esfuerzos diplomáticos para alcanzar una solución definitiva. La reunión en Egipto se considera un punto de inflexión en los esfuerzos internacionales por estabilizar la región y proteger a los civiles afectados por el conflicto.