Fuente de la imagen: latercera.com
Claudio Bravo no formará parte de la Selección Chilena en el reinicio de las Eliminatorias, que incluye los partidos contra Argentina y Bolivia. El cuerpo técnico liderado por Ricardo Gareca ha decidido no convocarlo. Esta determinación parece lógica, considerando que el histórico capitán del equipo nacional no ha jugado desde la Copa América. Su último encuentro fue el 21 de junio, contra Perú, y días antes había brillado frente a Argentina, ganándose el reconocimiento de figuras como Lionel Messi y Emiliano Martínez. A pesar de esta actuación sobresaliente, Bravo veía en ella una confirmación de su deseo de cerrar su ilustre carrera en un nivel similar al de sus mejores momentos, tanto en la selección como en sus experiencias en España e Inglaterra.
Con 41 años, una familia consolidada y estabilidad financiera, Bravo ha contemplado el retiro desde hace tiempo. Sin embargo, después de su destacada actuación contra el equipo de Lionel Scaloni, dos ligas emergentes, la MLS y la Liga de Arabia Saudita, mostraron interés en sumarlo a sus filas. La propuesta más tentadora provino de Los Ángeles Galaxy, que llegó a entusiasmar al portero chileno y su entorno cercano. La MLS siempre ha sido un destino atractivo para él y su familia. No obstante, estos posibles movimientos se han ralentizado, y en la actualidad, la vida de Bravo gira más en torno a sus compromisos familiares y actividades comerciales, incluidas campañas publicitarias y negocios personales.
En su última entrevista en el programa “Anatomía del Fútbol” del INAF, Bravo no fue definitivo sobre su futuro en el fútbol. Expresó su deseo de tomar buenas decisiones, ya sea seguir compitiendo, parar o involucrarse en actividades dentro o fuera del fútbol. Además, la idea de integrarse al cuerpo técnico de Josep Guardiola ha estado presente. La vida en Chile también ha reconectado a Bravo con sus raíces y afectos, especialmente en Buin y Viluco. Esto se ve reflejado en señales como volver a tener un número de teléfono chileno para él y su familia. A pesar de considerar residir en Puerto Varas, factores como la gestión de sus inversiones y su círculo íntimo influyen en su permanencia en la región Metropolitana, donde ha incursionado en el rubro inmobiliario y desarrollado un complejo deportivo.
