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Jorge Valdivia se encuentra en una situación delicada tras la decisión judicial emitida por la jueza Ely Rothfeld, del Octavo Juzgado de Garantía de Santiago, quien dictaminó prisión preventiva para el exjugador de fútbol de Colo Colo, Palmeiras y la selección nacional. La acusación, presentada por una mujer, señala a Valdivia de violación luego de un encuentro entre ambos el domingo pasado. Este tipo de medida cautelar es la más estricta dentro del marco procesal chileno y se estableció un periodo de investigación de 90 días. El exfutbolista cumplirá esta condición en el Complejo Penitenciario de Rancagua.

Rothfeld justificó su decisión basándose en “la gravedad del hecho, la severidad de la pena potencial, y las graves consecuencias hacia la víctima, sugiriendo un riesgo para la seguridad pública y la posibilidad de huida del acusado”. El mismo día, la Fiscalía Oriente dio a conocer que había iniciado una pesquisa relacionada con un supuesto delito sexual imputado a Valdivia. La denunciante, cuya identidad se mantiene en confidencialidad, acudió al Servicio Médico Legal (SML) en Independencia, para reportar el incidente.

El relato de la víctima, una tatuadora de profesión, precisa que tuvo lugar el 20 de octubre. Ambos se encontraron en el restaurante peruano Chicha en Ají, en Providencia, para tratar un servicio. En el lugar, bebieron dos piscos sour, y posteriormente, la denunciante afirma no recordar nada más de aquella noche, exceptuando una comunicación con Valdivia quien habría admitido que sostuvieron relaciones sexuales.

En defensa propia, Valdivia emitió un comunicado a través de la radio Bío Bío, aseverando: “Desconozco las motivaciones detrás de esta denuncia, pero niego firmemente haber agredido sexualmente a alguien”. Asimismo, manifestó haber participado en una relación consensuada con una mujer adulta y declaró su disposición a colaborar con la Fiscalía para aclarar las acusaciones. Valdivia también instó a los medios a ser prudentes y respetar su derecho a la presunción de inocencia.

La abogada Erika Maira defendió al exfutbolista, solicitando su cooperación inmediata con la justicia argumentando la inocencia de Valdivia en lo que describe como una relación consensuada. La defensa proporcionó información relevante para ayudar a clarificar el caso, incluso autorizando la inspección de las comunicaciones entre Valdivia y la denunciante.

Maira comentó sobre el estado de ánimo de Valdivia, afirmando que “está muy esperanzado en que la investigación y la cooperación con la justicia arrojen luz sobre los hechos”. Durante la audiencia, Jorge Valdivia fue acompañado por su hermano, Claudio.