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En una mañana a las 6 a.m., Gyaltsen Moktan se despertó en pánico en 2019. Trabajaba en un buffet de sushi de todo lo que puedes comer y era el encargado de abrir el restaurante cada día. Para despertarse, programó la alarma “By the Seaside” de Apple en su iPhone, pensando que la melodía relajante haría que despertar fuera una experiencia tranquila.

Desafortunadamente, la apuesta salió mal. La alarmante melodía evoca comparaciones con sonidos desagradables como clavos en una pizarra, la palabra “húmedo” y niños gritando en un avión. A pesar de que algunos defienden este tono, muchos usuarios lo encuentran perturbador y causante de estrés y ansiedad.

A lo largo de la historia, los despertadores han evolucionado desde campanas de iglesia y aldaboneros hasta los actuales tonos sofisticados que intentan despertar a las personas de manera gradual. Sin embargo, “By the Seaside” ha generado una división de opiniones entre los usuarios, quienes lo consideran una experiencia de “amor-odio” que los despierta de manera efectiva pero, al mismo tiempo, genera incomodidad y reacciones emocionales negativas.